FUERA MASCARILLAS

 Como ya sabréis las mascarillas no son obligatorias como lo eran hasta hace unos días, únicamente lo son en los médicos y hospitales, podemos decidir si ponérnosla o no cada uno.

Una vez quitadas las cascarillas volvemos como anteriormente a ver las caras de las personas tal y como son, sin necesidad de tener que imaginárnosla como será sin la mascarillas y crear a veces falsas expectativas de cómo será la persona sin esa mascarilla.

Las mascarillas a parte de traer cosas malas también a traído cosas buenas. Hay gente que se refugiaba en la mascarilla para relacionarse con las personas ya que se sentían seguros con ella y por lo tanto daban el paso de relacionarse, también han ayudado a conocer a personas más íntimamente y a no fijarse tanto en el físico de la persona, si no a conseguir interiorizar más con las personas aunque las viésemos a través de una mascarilla y nos tuviésemos que imaginar como será la persona sin verla por completo la cara. 

En ese aspecto hemos avanzado bastante con el tema de llevar la mascarilla, y personalmente como adolescente pienso que hemos conseguido valorar más el interior de las personas a la hora de conocerlas y no fijarnos en una simple apariencia física que no nos llega a gustar de primeras. Muchas veces habremos perdido oportunidades de conocer a personas maravillosas que nos podrían aportar mucho por el simple hecho de fijarnos en un simple físico y echar para atrás a las personas porque no nos gusta su físico o su apariencia.

En conclusión podemos decir que de todo lo malo podemos sacar algo bueno y creo que en este aspecto hemos conseguido avanzar o eso creo.